martes, 18 de septiembre de 2012

A mediados de los noventa, le preguntaron cómo usaría una computadora para crear su siguiente novela."Introduciría en el ordenador -dijo- cerca de un centenar de novelas, otro centenar de textos científicos, la Biblia, el Corán, unas pocas agendas telefónicas (muy buenas para los nombres) [...] usaría un programa que los mezclara todos e hiciera unos pocos cambios -como quitar todas las A- [...] El siguiente paso sería imprimirlo todo y leerlo cuidadosamente [...] subrayando los pasajes importantes. Entonces lo cargaría todo en un camión y lo llevaría al incinerador más próximo. Mientras estuviera ardiendo, me sentaría debajo de un árbol con un lápiz y una hoja de papel, y dejaría que mis pensamientos vagaran hasta que se me ocurriesen un par de líneas, por ejemplo: "La luna estaba en lo alto del cielo, el bosque susurra". 
 Tomado de El Dominical El Comercio, 8 de enero del 2012.

1 comentario: